OPINIONS i PROPOSTES

¿POR QUÉ UNA ORDENANZA DE CIVISMO EN NUESTRA CIUDAD?

divendres 19 de gener del 2024, Sant Andreu de la Barca

 

 

Sant Andreu de la Barca es una ciudad plural, diversa y socialmente muy activa. Tradicionalmente es un municipio en el que los vecinos y vecinas viven la calle como espacio de intercambio, de relación y de disfrute. En 5,5 km² convivimos casi 27.000 habitantes.

Esta riqueza de Sant Andreu implica retos para la convivencia que se pueden manifestar en el inadecuado uso y el deterioro de los espacios públicos y del mobiliario urbano; en la generación de ruidos molestos o el mal uso de los espacios de recogida de basuras; en el incumplimiento de las normas de tráfico o el desprecio por las creencias o las opiniones de los demás…

Éstos u otros problemas pueden generar conflictos y afectar al bienestar de la ciudadanía, alterar el clima de respeto y tolerancia y, en definitiva, disminuir la cohesión social.

 

El ayuntamiento debe garantizar la correcta limpieza y mantenimiento de los espacios públicos al menor coste posible y de la forma más eficiente y eficaz. También ha de promover que la interacción y convivencia diaria en los espacios públicos sea segura, tranquila y saludable, y, que los vecinos y vecinas (grandes y pequeños, jóvenes y mayores), las personas que conviven, vienen a trabajar, a comprar o visitan la ciudad puedan interactuar libremente, compartan actividades culturales, de ocio, sociales, comerciales y puedan descansar respetando las diferencias y con una orientación inclusiva.

 

Hacer de Sant Andreu de la Barca una ciudad más cohesionada socialmente, cívica, limpia y acogedora, respetuosa con los derechos de las personas, protectora del patrimonio, de los espacios públicos, del paisaje urbano y del entorno, es tratar de configurar un modelo de ciudad que requiere la implicación y la participación de todos y todas.

 

Los comportamientos incívicos de una minoría, además de dañar bienes y espacios que son patrimonio de todos y todas, suponen un ataque a la convivencia, una actitud de insolidaridad y falta de respeto hacia una gran mayoría de vecinos y vecinas que asumen cívicamente sus derechos y deberes ciudadanos.

Emplear miles de euros cada día, del dinero de todos, en labores de limpieza y mantenimiento que podrían evitarse y tener otro destino más necesario y social, es también una responsabilidad del gobierno de la ciudad.

Respetar los espacios públicos y cuidar el patrimonio de nuestra ciudad es mejorar la sostenibilidad, permite aplicar el presupuesto con racionalidad a lo más prioritario y ser solidario con el resto de vecinos y vecinas.

 

Es con este objetivo que, desde el equipo de gobierno de En Comú Podem y FEM Sant Andreu, estamos impulsando, de forma colaborativa con el resto de grupos municipales y con la ciudadanía, la elaboración de una ordenanza de Convivencia y Civismo.

 

Esta ordenanza es una herramienta para mejorar la convivencia ciudadana regulando los diferentes aspectos que inciden en ella.

También, tiene como objeto promover los valores cívicos, educar en el respeto y la corresponsabilidad de lo público, de lo que es de todas y todos y prevenir las conductas negligentes e irresponsables que puedan perturbar la convivencia.

 

Es por esto que la ordenanza de Convivencia y Civismo, lejos de ser un instrumento represivo o sancionador, pretende ser una herramienta preventiva, educativa y participativa que genere un cambio de hábitos y actitudes en la ciudadanía.

 

La ciudad es la casa de todos y todas y es, desde la responsabilidad compartida y desde el compromiso colectivo de su cuidado, como podemos hacer de Sant Andreu de la Barca una ciudad de la que sentirnos orgullosas y orgullosos.